domingo, 21 de febrero de 2016

AGENDA CON PENSAMIENTOS POSITIVOS

Se acercaba el cumpleaños de una buena amiga, pensando en que podría regalarle, me apetecía hacerle algo en lo que me tuviera que implicar en cuerpo y alma y lo conseguí.

Cada vez que ella lee un libro y encuentra una frase bonita con sentido siempre me la lee, con esa idea y sabiendo que algo que ella usa a diario es una agenda, la cosa estaba relativamente fácil, la idea era fácil su manufactura, no tanto...

Aquí está el Paso a Paso, faltan algunas fotos, pero intentaré que las explicaciones suplan su falta.


AGENDA CON PENSAMIENTOS POSITIVOS 


Quise empezar la agenda desde su inicio, osea desde un folio...
Me planteé que quería ponerle un pensamiento positivo diferente cada día, me hacían falta 365 pensamientos positivos distintos.

También quería ponerle un día de cada color, aunque luego por rapidez y mejor lectura los puse todos del mismo color...





Así que me interné en alguno de mis libros, en la red y escogí los que mas me gustaron para ella, una vez con los 365 pensamientos positivos elegidos, empecé con la confección de las páginas de la propia agenda.


Para no equivocarme en la composición de los días del año tuve que hacer una agenda de prueba, que además me sirviera de guía en como poner los días en cada libreto.... corte un folio un dos y luego esa cuartilla doblada por la mitad, así fui haciendo 10 libritos de 10 cuartillas cada una.


Una vez que tuve los libritos los dispuse como si fuera la agenda ya terminada y fui escribiendo lo que le correspondería en cada página... Dedicatoria, imagen, calendario, y por supuesto los días del año. Terminada mi agenda de guía, solo quedaba pasarlo a un ordenador, elegir la letra y el diseño, darle color, como comenté antes la primera idea era que cada día fuera de un color diferente, pero había letras más legibles que otras según el color, así que decidí que fuera todo del color donde se leyera mejor, ya solo faltaba colocar cada día en su sitio y escribir los pensamientos uno en cada día.


Cuando tenemos todo el año hecho en el ordenador hay que imprimirlo, cortarlo con cuidado y doblarlo... hay que colocar cada hoja en su libreto correspondiente para que todos los días vayan correlativos y no haya errores una vez cosida y montada la agenda.





















Ya están todas las hojas dobladas y colocados los libritos en orden, esto hay que comprobarlo antes de nada, no vaya a ser que se nos haya descolocado alguna hoja y no nos cuadren los días.

Ahora se sujeta con varios gatos o sargentos, para que no se mueva y se le hacen las marcas, con una sierra finita haremos unos cortes para luego poder pasar el hilo y coserla.
Si os fijáis hay tres marquitas en cada uno de los lados de la pinza central, ahí es donde con la sierra cortaremos un poquito el papel, 1mm más o menos.
Hay que procurar que el corte sea limpio y no se muevan las hojas, quedarían descuadradas a la hora de montarla.

Aquí con los cortes hechos es más fácil pasar la aguja ya que no hay que clavarla, solo pasarla por el agujero. Puse unos trocitos de sábana de lienzo en el centro de las costuras, para que le sirviera de refuerzo y fuera más complicado que se rompieran las páginas.


Aquí es como queda una vez finalizada la costura, las pinzas son para que quede prensado y no aumente en tamaño hasta finalizar la fase de pegado.  
Eligiendo los papeles que van a ser la trasera y el frontal de las tapas de la agenda.




















Otra vez a sujetarla con los gatos, esta vez para ponerle una capa de cola que pega los libritos, endurece el lomo y evita la rotura de las hojas, aquí aprovechamos para pegar la cinta negra que hará de separador y marcapáginas de la agenda.



Como el reciclaje es algo que llevo dentro aprovecho cualquier ocasión para aprovechar un cartón, un papel, etc.... aquí como se ve es una caja de cereales lo que me sirve como tapas de la agenda. 

Se unta bien de cola blanca y se pega en el papel elegido para el interior de las tapas.


Aquí ya tengo pegada una y la otra en camino, es mejor recortar las esquinas para que quede bien al doblar el papel. 


El siguiente paso es unir los interiores de las tapas a los libretos, en el lomo para que quede más fuerte le pongo una gasa tupida doblada en varias veces.


Ahora toca cortar el papel a medida de los cartones que utilizamos para las tapas y el lomo, siempre dejando un poco para poder doblarlo. 


Recortado y pegado... 


Esta es la parte del derecho.


Secando bien tanto las tapas como el interior... si os fijáis esta la gasa prendida con unas pinzas para que no se despegue.


Para reforzar más el lomo y no se ralle o se despegue cuando la agenda vaya corriendo por el bolso de mi amiga de un lado a otro, le he puesto un trozo de papel adhesivo plastificado negro. Lo que hace es que evita que se rompa puesto que está plastificado.


A partir de aquí no hay más fotos, las perdí en la cámara, así que intentaré que mis explicaciones sean lo suficientemente elocuentes como para que lo entendáis bien. 

El paso siguiente esta cantado, unir con cola las tapas de la agenda y su interior con sus libritos. No os olvidéis de poner también la goma que cerrara la agenda. 

Una vez pegado y todo encuadrado y seco... se le da una capa de barniz al agua, una vez seca se le pasa con una lana de acero para quitar asperezas... 

Para terminar le apliqué un poco de cera incolora y le dí fuerte con un trapo para quitar los excesos y quedara suavecita. 

Esta es la puesta de largo.... La verdad es que a mi amiga le gustó mucho, lo malo es que a los demás también y tengo varias peticiones... jejeje... 




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